En los Juegos del Habla no podía faltar la MAGIA, porque para hacer un truco no todo son polvos mágicos, también tienes que ser capaz de que tu público entienda lo que estás haciendo y, para ello, tienes que intentar que los espectadores estén pendientes tanto de lo que haces como de lo que dices, para que centren su atención en lo que te interese. Si estás muy callado y quieto, solo mirarán a tus manos y hará más difícil crear la ilusión.
Para hacer un buen truco de magia debes prestar atención a muchos detalles, pero no debes olvidar:
Practica hasta que el truco te salga sin pensar: como todo lo que tratamos de aprender, mejoraremos mientras más practiquemos para hacerlo cada vez mejor
La precisión es lo que dejará a los demás con la boca abierta: ¿imaginas un jugador o jugadora de baloncesto que no sepa botar el balón? ¿un cocinero o cocinera que no sepa freír un huevo? La magia será más increíble mientras mejor se haga.
Trabaja tu puesta en escena: Cuida tu ropa, los elementos del escenario, la iluminación, etc. Todo tiene que estar preparado para mejorar tu actuación.
Cuida cada detalle al mostrar el truco. Para hacer magia es imprescindible saber contar historias, ¡pero ojo!, no solo con palabras.
Para aprender es muy importante observar a una persona experta para saber qué es lo que hacen tan bien. Un genio de la magia y las palabras es Luis Piedrahita, que en sus redes sociales (Facebook e Instagram) ha ido dejando numerosos trucos y su revelación para que tú también puedas hacerlos. Dentro de la chistera podrás encontrarlos:
Otra propuesta interesante y sencilla nos la ofrece en el siguiente vídeo "Un papá mago", para lo que sólo necesitarás algo que siempre llevas contigo: tus manos:
Por si no te lo hemos puesto fácil, te dejamos algunos vídeos de niños y niñas para que te animes aún más:
El Tabú es un juego de mesa que se juega en equipos de dos o más personas y que permite la mejora de la rapidez mental y del uso que le podemos dar al lenguaje. Describir una palabra sin tener permitido decir otras muy similares a ella es sencillamente complicado para muchos niños. Si además le añadimos un temporizador y la presión de tener que conseguir más puntos que el resto, tenemos un reto importante por delante. Las primeras partidas pueden ser frustrante para algunos, pero poco a poco, y conforme avancen los turnos, su mente irá agilizándose y les dará las herramientas necesarias para poder mejorar su capacidad de habla. Viene muy bien para alumnos callados y tímidos, o que no suelen participar en el aula.
A grandes rasgos, el juego consiste en que un miembro de un equipo debe conseguir que su compañero acierte una palabra antes de que se agote el tiempo marcado. Para ello, el miembro del equipo le irá dando pistas, pero estará prohibido decir las llamadas palabras tabú, que son palabras seleccionadas en una tarjeta y que están relacionadas con la palabra que el compañero debe adivinar.
Por ejemplo, una persona debe acertar la palabra periódico, pero su compañero no puede nombrar en la descripción papel, información, leer ni kiosco.
Algunas reglas:
Se divide a los jugadores en dos equipos con el mismo número de miembros.
Un equipo elige un jugador para describir la palabra y el otro equipo elige un jugador para vigilar que no se mencionen las palabras tabú. Estas posiciones se rotarán para que todos las ocupen una vez.
El jugador que vigila debe tener un temporizador en su mano para ponerlo en marcha cuando empiece la descripción de la palabra a adivinar y debe colocarse detrás del jugador que describirá la palabra para que pueda ver la carta y las palabras tabú o prohibidas.
Antes de comenzar a describir la palabra se activa el temporizador. El tiempo que se dé dependerá de la elección y la dificultad que se quiera dar al juego.
Habrá que describir la palabra sin utilizar las palabras tabú que hay en la tarjeta escritas y para ello está permitido cantar y no la mímica.
El jugador que describe las palabras podrá seguir sacando cartas para tratar que su equipo adivine hasta que se termine el tiempo determinado par su turno. Cuando se acabe el tiempo se termina el turno del equipo.
Se anotará un punto al equipo por cada palabra adivinada.
Se fijaran un número de turnos para cada partida y el juego terminará cuando todos los turnos fijados se hayan agotado.
El equipo que obtenga más puntos ganará.
Algunas variantes:
Se podrán practicar diferentes variantes para poder repasar y fomentar algunos conceptos del área de Lengua Castellana:
Así se podría tener en cuenta podría ser la identificación de la morfología de las diferentes de las palabras a describir.Para ello, los jugadores, antes de comenzar su descripción, señalarán el tipo de palabra que están intentando adivinar sus compañeros, señalando si se trata de un verbo, sustantivo, determinante, etc. Si queremos complicarlo un poco más podemos pedir, además del tipo de palabra, las carácterísitcas concretas de la misma, por ejemplo: determinante artículo femenino; sustantivo común, concreto, masculino y plural.
Otra variante que se puede utilizar es la de los sinónimos o antónimos. En este caso, los participantes deberán utilizar para describir la palabra solo sinónimos de las palabras prohibidas, pero en ningún caso podrán realizar descripción alguna. Otro de los casos, podría ser el uso de antónimos.
Material necesario:
Tarjetas tabú fácil
Tarjetas tabú difícil
Además de jugar en familia, a continuación, os damos a conocer una propuesta de juego virtual llevada a cabo en el CEIP Simón Fernández de Estepona. Así, de manera privada e individual, se les envía al alumnado una tarjeta de Tabú y responden con un audio que debe ser validado en cuanto a vocalización, que no dice ninguna palabra tabú....
Al día siguiente a las 9:00 se comparte los audios con todos en un grupo y deberán intentar acertar la palabra que trata de describir cada alumno/a. Finalmente, a las 11:30 horas, se les da las soluciones para comprobar los aciertos. En definitiva, una fórmula muy motivante para empezar la jornada, que nadie quiere perderse.